Tuvimos que esperar bastante tiempo a que la segunda balsa , la de ellos , arrancara. Mientas veiamos a Alvaro que bajaba hablaba con los encargados y volvia a su camioneta . Por fin la vimos ponerse en marcha y todos contentos. Al llegar a nuestra orilla empredimos la marcha a nuestro apartamento . Un descanso incluido una ducha y un cambio de ropa limpia y preparados para conocer la ciudad antigua ( yo hace unos años ya estuve unos diez dias invitados i dar un ciclo de conferencias a farmaceuticos de Hispanoamerica en el centro de cooperacion internacional de España, en el antiguo convento de Santo Domingo ,un lugar precioso ).
Ya de noche, salimos a conocer la ciudad antigua. después de dar un buen paseo , tuvo Alvaro la gran idea de montar en un coche de caballo. Fue una gran idea y un regocijo de los niños. Recorrimos todas las calles, plazas ,plazoletas y callejuelas. Contemplamos las magnificas fachadas de las iglesias,de las casonas y los palacetes.. Era sábado noche y todo estaba muy animado,cosa que tanto por el paisaje urbano como por el ambiente me recordaba mi tierra. Las flores y el aroma, la musiquilla, el ir y venir de un un sitio a otro, las aceras y las terracitas abarrotadas ,todo era evocación de mi Andalucía
Las explicaciones del cochero convrtido en un gran guia turistico con explicaciones precisas aunque algo de su propia cosecha, nos hizo pasar un tiempo maravilloso .El mas feliz,Alvarito .Los demás también.
Después de no se cuanto tiempo pero no menos de hora y media ,dos o mas horas despedimos de nuestro guía y vehículo y fuimos a algún lugar apropiado para cenar y al fin recalamos en una mesa en plena calle ,frente a una placita,de un restaurante italiano con buena calidad tanto para los niños como para los mayores con en directo . Al final cuando los peques ya daban señales de cansanio e impertinencia nos fuimos a casa con la idea de volver por la mañana a misa de 11h.en Santo Domingo.
No fue así puesto que a esa hora no había misa en esa maravillosa iglesia que yo ya conocí cuando vine a Cartagena años atrás. Esto nos permitió volver a visitar la ciudad mas bella de America .
Al regresar a Barranquilla estábamos muy feliz y satisfechos.
Como resumen, volvimos muy contentos de Colombia. Por todo. Por lo bien que vimos a todos, por lo acoplados que están y lo queridos que se sienten. Por los buenos amigos que han encontrado. Deseo a Alvaro le sigan las cosas bien y que tenga mucha suerte. Y que todos sigan siendo muy felices. Un fuerte abrazo y un beso a todos .